Tras las proclamas de libertad total en el ámbito económico y social, tras declararse anarcocapitalista y declarar que quería eliminar al máximo al Estado de la vida del ciudadano, Milei muestra su verdadera cara, como un perfecto reaccionario. Declaró que si el parlamento se opone al paquete de más de 300 leyes, muchas de las cuales apuntan a la venta de empresas estatales y la explotación del territorio argentino, convocará a un referéndum popular.
También solicitó plenos poderes, a través de la ley Ómnibus presentada al Congreso por el líder argentino en los últimos días. En realidad, esta propuesta pide a los diputados que le den amplios poderes, invocando la “declaración de estado de emergencia pública” en diversos ámbitos, incluidos el económico, financiero, fiscal, seguridad, defensa, aranceles, energía, salud, administración y social. Si a nosotros, los italianos, los plenos poderes nos retrotraen a las payasadas de Matteo Salvini de Papete, que en realidad fueron un suicidio político, en América del Sur se toma la cosa muy en serio. De hecho, muchos periódicos han comparado esta eventualidad con el autogolpe del presidente peruano Alberto Fujimori en 1992.
Personalmente, también considero que los dos personajes son similares: tanto Fujimori como Milei se presentaron como figuras externas al juego político y ambos proponen recetas económicas liberales. para el shock financiero. Siempre hemos anunciado que las políticas de Milei serán muy duras para los sectores más pobres de la población, pero la liquidación de empresas estatales, habiéndola vivido en primera persona, sabemos que a largo plazo no trae nada bueno para los sectores proletarios de la población. Incluso en Argentina se presiona para que se vendan, mostrando sólo aquellas empresas que están teniendo pérdidas, como una carga para el Estado argentino, ocultando que también se venderán joyas, además de la explotación real. del territorio argentino.
Seguramente se avecinan tiempos difíciles para el pueblo argentino, tiempos de graves dificultades económicas, pero esperamos no tener que presenciar una represión reaccionaria por parte de un presidente que se declara liberal, pero que sólo es liberal cuando se trata de vender empresas estatales y partes del territorio argentino, como las Malvinas, que habiendo sido defendidas con sangre argentina, serán siempre un pedazo sagrado de la patria. Cualquiera que sea el acontecimiento, nefasto o no, que surja en el horizonte argentino, siempre estaremos al lado de nuestros compañeros, que luchan por el bien de la patria, y no por el bienestar de los grupos financieros apátridas.
Patria o muerte
Matteo Cantù